Décimo octavo domingo del tiempo ordinario

Queridos feligreses y amigos de San Jerónimo,

¡Pax Christi semper vobiscum!

Hace dos fines de semana publicamos la carta del Cardenal Cupich con respecto a sus cinco sugerencias para responder positivamente a los desalentadores resultados de la violencia que a menudo escuchamos en las noticias y en otras redes sociales. Somos conscientes de que la repetición constante del crimen y la violencia no solo devalúa la vida per se, sino que también nos quita un sentido de unidad que nos hace apreciar más la belleza de la vida. En respuesta a la invitación del Cardenal, nuestra parroquia llevará a cabo una Manifestación por la Paz en la Fiesta de la Transfiguración de Nuestro Señor (el viernes 6 de agosto). La intención principal de esta manifestación es dar consciencia a nuestro vecindario de Rogers Park de que la vida pacífica es un regalo de Dios, que se canaliza principalmente a través de nuestra elección de promover la no violencia.

Este concepto de paz no es simplemente una ausencia de guerra o tal vez tener un vecindario tranquilo donde no existe el conflicto entre vecinos. Estar en paz no es simplemente la ausencia de vehículos ruidosos, de una sirena a todo volumen de un camión de emergencia o de la música fuerte de la fiesta de un vecino. Estar en paz es un estado del ser en el que el corazón y la mente de uno se unen con los de los demás con el único propósito de aspirar al bien común. A menudo no nos damos cuenta de que también podemos ser violentos al tratar entre nosotros, aunque no usemos ningún tipo de arma para dañar físicamente a alguien o quitarle la vida. Es una realidad muy común que en nuestras conversaciones con otros, como un compañero de trabajo, un vecino de al lado o incluso entre los miembros de nuestra propia familia, usamos palabras que hieren y degrada a otra persona. El amor a Dios se manifiesta en el genuino amor cristiano al prójimo.

La violencia tiene tantas formas y facetas que aparecen clandestinamente cada vez que nuestro ego es desafiado. Es durante esas situaciones en las que debemos ser más conscientes de si nuestras reacciones ante el comportamiento de alguien generan no violencia. La triste realidad de los tiroteos en el vecindario, los robos, los asaltos, el uso de drogas ilegales y cosas por el estilo, tiene su origen en una desorientación profundamente arraigada del significado y el propósito de la vida. Para detener la violencia, es necesario tener un encuentro consigo mismo consciente de un propósito de vida orientado a vivir los valores evangélicos para el bien común.

Se supone que la manifestación que está organizando nuestra parroquia inculcará una pregunta que pueda generar una respuesta inspiradora para nosotros y nuestros vecinos para que todos puedan promover una vida pacífica. La participación conjunta del Departamento de Policía del Distrito 24, la Oficina del Distrito 49 y la Parroquia de San Jerónimo es una iniciativa que, con suerte, puede traer a nuestra comunidad un sentido de unidad y preocupación por los demás como hijos de Un Creador.

Considere ser parte de esta iniciativa. Haga sus carteles y llame la atención de los demás para promover la paz, la justicia y la no violencia en esta manifestación. Comenzaremos a reunirnos frente a la iglesia a las 6:00pm. Tan pronto como termine la misa de las 5:30pm, marcharemos a lo largo de la calle Clark hacia el sur hasta la avenida Pratt y luego continuaremos hacia el este hasta llegar al muelle de Farwell junto al lago. Invocaremos al Señor mientras oramos por la paz y la no violencia. Les animo a que también traigan a sus hijos que ya están en la edad de razonar para que ellos también puedan ser parte de esta Manifestación por la Paz.

Al final, me gustaría agradecerles por su constante apoyo y colaboración con nuestra vida parroquial. El grupo de coro que patrocinó la venta de comida el fin de semana pasado hizo un trabajo maravilloso al organizar el evento. El Comité Kermes continúa planificando la Kermes el 13, 14 y 15 de agosto. Asegúrese de entregar sus boletos vendidos de la Rifa la semana que viene e intente terminar las ventas lo antes posible para que podamos cumplir con nuestra meta urgente de recaudación de fondos para la creación del parque parroquial. Tenga la seguridad de que su generosidad siempre será conocida por Dios, quien nos bendice siempre con una abundancia de Su gracia y protección.

Sinceramente en Cristo y María,