Queridos feligreses y amigos de San Jerónimo,
¡Pax Christi semper vobiscum!
En 1925, el Papa Pío XI declaró la celebración de la Solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo, el último domingo del ciclo litúrgico anual. La primera celebración de esta solemnidad fue en conmemoración del XVI centenario del Concilio de Nicea, celebrado en el año 325 d.C. El Concilio de Nicea afirmó firmemente que Cristo tiene dos naturalezas distintas, la humana y la divina, unidas en una sola persona, la Segunda Persona de la Santísima Trinidad. Además, esta solemnidad nos invita a reflexionar sobre la Realeza de Jesucristo que comparte con nosotros en el Bautismo.
La función principal del rey es gobernar a sus gobernados y protegerlos mediante la autoridad que exhibe. Un buen rey es el que sirve a su pueblo y promueve su progreso según sus necesidades. Mientras nuestra liturgia de este fin de semana reitera que Jesucristo es nuestro Rey, la lectura del Evangelio de este domingo nos da una idea irónica de la realeza de Jesús. Él gobierna desde la Cruz en lugar de gobernar desde un trono real. Lleva una corona de espinas en lugar de llevar una corona de oro. Se le representa desnudo en lugar de llevar un rico manto púrpura. Sin duda, estas imágenes de Cristo no son nuevas para nosotros. Hemos crecido con estas imágenes que abundan en el arte cristiano y en todas las iglesias católicas. Pero, ¿qué significan estos símbolos mientras reclamamos nuestro discipulado como Cristo?
Al volver a la realeza bautismal que compartimos con Jesús, ¿cómo ejemplificamos nuestro sentido de gobierno en el espíritu de servicio al prójimo? Sabemos que hay una forma de gobierno asociada a la paternidad. También hay una forma de gobierno que se vincula con todo tipo de trabajos como también un tipo de gobierno en nuestra participación en los ministerios parroquiales. Sin embargo, esta comprensión bíblica de la gobernanza es totalmente diferente a la de simplemente dar órdenes a otros por el hecho de mandar. Este comportamiento humano caído es a menudo una posible tentación cuando alguien está en la posición de poder o liderazgo. El significado bíblico de gobernar consiste en prestar servicio a los demás. ¿Recuerdas la conversación de Jesús con los hijos de Zebedeo? Querían sentarse a ambos lados de Jesús para afirmar un estatus de autoridad. Ya conoces el resto de la historia. (Marcos 10:35-45)
Al final, es realmente una cuestión de nuestra convicción sobre cómo vivimos nuestra llamada a la realeza bautismal que compartimos con Jesucristo. Se trata de nuestra convicción de imitar “el camino de Jesús” sobre cómo hacer de nuestra vida una expresión real de servicio que emana de su realeza. Nuestra conciencia de esta realidad es la clave para actualizar plenamente lo que Jesús nos mostró como ejemplo.
Finalmente, tenemos una nueva secretaria parroquial, María Elena Tapia. Por favor, denle la bienvenida cuando pasen por la Oficina Parroquial. También, los patrocinios para las Misas de Nuestra Señora de Guadalupe y para las Misas de la Novena de Navidad están disponibles para inscribirse. Nuestro boletín de hoy tiene información sobre los patrocinios de las misas. Nos vemos el próximo fin de semana. Gracias por apoyar constantemente nuestros ministerios parroquiales.